Formato B de la Manifestación de Impacto Social: alcance, actividades y requisitos clave
En el desarrollo de proyectos energéticos, la Manifestación de Impacto Social (MIS, antes EVIS) es una herramienta fundamental para garantizar la sostenibilidad, la transparencia y la aceptación social de las inversiones. La Secretaría de Energía (SENER) exige este instrumento como parte del proceso de autorización de proyectos, y las Disposiciones Administrativas de Carácter General sobre la Evaluación de Impacto Social (DOF, 2018) establecen diferentes formatos según el tipo y la magnitud de las actividades.

El Formato B de la Manifestación de Impacto Social aplica a proyectos con impactos sociales moderados, que implican cierta interacción territorial o tecnológica, pero no alcanzan la escala de los grandes desarrollos. Este formato combina la identificación técnica de riesgos con la caracterización básica del entorno social, permitiendo a la autoridad evaluar la viabilidad social del proyecto de manera ágil y precisa.
¿A qué actividades aplica el Formato B?
De acuerdo con la SENER, el Formato B de la Manifestación de Impacto Social debe presentarse para los siguientes tipos de proyectos:
- Exploración superficial sísmica terrestre no invasiva o que no implique infraestructura.
- Distribución por medio de ducto de gas natural y petrolíferos.
- Distribución de petrolíferos mediante planta de distribución.
- Transporte por ducto de hidrocarburos, petrolíferos y petroquímicos con longitud menor o igual a 10 kilómetros.
- Distribución y transporte de hidrocarburos y petrolíferos por medios distintos a ductos.
- Servicio público de transmisión de energía eléctrica en zonas o parques industriales, y generación eléctrica con capacidad menor a 10 MW (excepto hidroeléctricas), o mayor a 10 MW y menor a 250 MW, siempre que se ubiquen dentro de instalaciones industriales, productivas o comerciales ya existentes.

Estos proyectos suelen desarrollarse en ámbitos urbanos, industriales o semiurbanos, donde la presencia de infraestructura previa reduce los impactos sociales, aunque sigue siendo necesario evaluar posibles afectaciones en movilidad, seguridad, uso de suelo y convivencia vecinal.
¿Qué información debe incluir el Formato B?
El Formato B requiere la presentación de un documento técnico y social que describa con claridad:

- Datos generales del promovente y del proyecto.
- Descripción técnica y ubicación geográfica.
- Identificación del área núcleo y del entorno inmediato.
- Características socioeconómicas y demográficas básicas de las localidades cercanas.
- Identificación y valoración de impactos sociales potenciales.
- Medidas de prevención, mitigación y comunicación con la comunidad.
A diferencia del Formato A, el Formato B incorpora un análisis más detallado del territorio y de las condiciones sociales donde se instalará el proyecto, así como mecanismos de diálogo con actores locales y planes de gestión social ajustados a su escala.
Importancia del Formato B en la planeación social y energética

Cumplir con la Manifestación de Impacto Social en el Formato B es un paso clave para demostrar la responsabilidad social y ambiental de la empresa. Este instrumento ayuda a anticipar conflictos, corregir fallas de comunicación, fortalecer la relación con comunidades y autoridades locales, y mejorar la percepción pública del proyecto.
Además, su correcta elaboración evita observaciones o requerimientos adicionales de la SENER, agilizando los procesos de autorización y garantizando que el proyecto avance conforme a las normas vigentes del sector energético.
Cómo puede ayudarte Área de Influencia, Consultores

En Área de Influencia, Consultores, desarrollamos Manifestaciones de Impacto Social con base en el Formato B, alineadas con la normativa mexicana y los estándares internacionales como los Principios de Ecuador y las Normas de Desempeño de la IFC.
Nuestro equipo multidisciplinario —integrado por especialistas sociales, ambientales y territoriales— se encarga de identificar los impactos sociales con rigor técnico, diseñar medidas de mitigación y elaborar planes de gestión social que fortalezcan la viabilidad del proyecto y aseguren el cumplimiento regulatorio ante la SENER.
Acompañamos a nuestros clientes desde la etapa de planeación hasta la entrega formal del expediente, garantizando una presentación sólida, verificable y bien fundamentada.
Conclusión

El Formato B de la Manifestación de Impacto Social es un instrumento esencial para proyectos energéticos medianos o de infraestructura moderada. No sólo cumple con la normativa vigente, sino que fortalece la credibilidad, minimiza riesgos sociales y demuestra el compromiso del promovente con el desarrollo sostenible y la justicia energética.


